¡Muy
buenas, gente!!!! Estamos en una nueva entrevista para Entretanto
Magazine y Preguntas con Arte, en este caso con el ilustrador Martín
Blanco. ¡Hola, Martín! ¿Puedes presentarte tú mismo para que
nuestros lectores puedan conocerte?
Hola.
Soy argentino, licenciado en Bellas Artes y después de estar
viviendo 6 años en Barcelona, ahora llevo 10 años en el Principado
de Andorra. Soy artista digital y tradicional y me dedico
profesionalmente a la ilustración desde 2007, que compagino con mi
trabajo de profesor de arte.
Si
alguien quiere saber más de ti, ¿dónde puede informarse?
Toda
la información, curriculum, exposiciones, eventos, además de gran
parte de mi obra, está en mi web (que debería actualizar más, por
cierto)
www.martblanco.com
El
día a día lo manejo en mi cuenta de Facebook:
https://www.facebook.com/MartinBlancoArt/
¿Qué
ilustradores te gustan y tomas como referencia?
Es
imposible nombrarlos a todos. En lo referente al mundo digital, tengo
la suerte de conocer personalmente a uno de los grandes, como es
Mario Sánchez Nevado y dentro de lo que puedo, intento aprender de
su trabajo.
La
ilustración de Dave McKean me parece fabulosa, pero en líneas
generales, no tengo un referente claro. En ese sentido soy bastante
ecléctico. Intento ver mucho de muchos estilos diversos porque
siempre hay algo que puede servirte como disparador de nuevas ideas o
incluso de nuevas técnicas.
En
tu web comentas que haces dibujos tanto digitales como tradicionales.
¿Qué te aporta cada uno de los dos estilos?
Si,
bueno, dibujé toda mi vida de manera tradicional hasta que encontré
el mundo digital en el 2003 y estuve bastante tiempo aprendiendo otra
vez, por así decirlo.
Desde
el 2010, trabajo paralelamente los dos estilos a la hora de crear mi
obra personal, pero la ilustración la produzco de manera digital
exclusivamente, porque de ese modo tengo una versatilidad y una
velocidad que con el tradicional se hace más complicado.
De
cara al proceso de corrección de los encargos, todo es más fluido
con el digital y como consecuencia, no se sufren tanto las fechas
límites de entrega.
Con
respecto al estilo tradicional, amo dibujar con lápiz y suelo ser
bastante obsesivo en cuanto a los detalles y el acabado de mis obras.
El grafito te da la posibilidad de controlar muy bien el tema de los
degradados en los grises y si lo sabes dominar, es una delicia.
¿Cuál
de los dos prefieres?
No
tengo preferencia, ya que son dos mundos muy distintos. De hecho,
cuando creo mi obra personal, voy decidiendo sobre la marcha con qué
clase de estilo cuadra mejor cada una de las ideas que tengo.
Vemos
en tu galería una gran cantidad de trabajos surrealistas. ¿A qué
se debe esta afición tuya por este tipo de arte?
Siempre
me gustaron los surrealistas y el manejo que tenían del mundo
onírico. Esa manera de mezclar cosas que aparentemente no tienen
mucho sentido, pero a su vez crean una complejidad en el discurso, me
encanta. Me sentí influenciado por el movimiento desde muy temprano
en mis épocas de estudiante.
Es
evidente que te tengo que preguntar por el maestro del surrealismo.
Háblanos de Salvador Dalí y de lo que representa para ti.
Bueno,
fue un referente, evidentemente. De hecho, de los surrealistas es el
que más me gusta, junto con Max Ernst.
De
todos modos, mi relación con mis referentes fue más bien cuando
estaba en pleno proceso de aprendizaje. Ahora es como si me hubiera
independizado de su influencia por decirlo de alguna manera. Me ayudó
mucho estudiarlos, junto con Miguel Ángel y Caravaggio y más cerca
en el tiempo, el maestro H.R. Giger, pero ahora intento estar más en
contacto con los nuevos lenguajes y discursos porque de hecho,
vivimos en un mundo completamente distinto en muchos aspectos.
También
eres portadista. ¿Qué crees que debe tener una portada para ser
buena?
Desde
mi punto de vista, una portada es eficaz y cumple su objetivo cuando
capta la mirada del espectador. No olvidemos que seguimos funcionando
de la misma manera que siempre: compramos las cosas por la portada. Y
hay demasiados libros en las estanterías de las librerías
intentando llamar la atención.
Lo
que me gusta son los diseños simples, no a nivel técnico, sino a
nivel compositivo. Prefiero las portadas con pocos personajes que no
compitan entre ellos en el poco espacio que de por síi
ya tieneo espacio que de por s Prefiero las portadas con pocos
personajes que no compitan entre sne me gusta son los diseños sí
ya tienen y eso al final hace que el mensaje tenga más fuerza. En
cuestión de portadas, para mí, lo bueno... si breve, dos veces
bueno.
Además,
dibujas cómics con un estilo muy diferente del resto de tus
trabajos. ¿Qué te aporta el cómic?
Es
un lenguaje que me encanta. Siempre fui amante de los cómics, de
hecho los sigo coleccionando y soy el Tesorero de la Asociación del
Cómic, Ilustración y Animación de Andorra (ARCA), que gestionamos
el Salón La Massana Cómic, en el Principado.
Contar
una historia en viñetas es muy difícil y hace que, además de las
cuestiones técnicas propias del dibujo, tengas que preocuparte de
cosas que tienen que ver con la narración, como el ritmo y la
velocidad entre viñeta y viñeta.
Siendo
ilustrador de cómics no puedo evitar preguntarte por mi dibujante
favorito: Alex Ross. ¿Qué piensas de él?
Alex
Ross me gusta, aunque no es de mis preferidos. Tiene una técnica
bestial y me encanta por eso, pero creo que a veces sus poses dan la
sensación de ser un tanto artificiales y eso supongo que tiene que
ver con el uso de referencias fotográficas. No tengo ningún
problema con eso, al contrario, al final todos lo hacemos, pero creo
que debería subordinar más esa cuestión a la narración.
La
técnica (la que sea) tiene que estar a disposición del mensaje y al
cómo contar ese mensaje y no al revés.
Del
estilo de Alex Ross, prefiero a Marco Djurkevic y Adi Granov.
Pero
en general mis gustos con respecto a los dibujantes de cómics van
por otro lado. Sacando a los que para mí son maestros, como Jim Lee
o Todd Mc Farlane, me gustan mucho estilos como los de Dave Mc Kean o
Ben Templesmith.
Además
de ilustrador también tienes una editorial en Argentina, Santa
Guadaña Ediciones. ¿Cómo surge este proyecto?
Mi
socio y amigo de toda la vida, Gonzalo Ventura es escritor y
guionista profesional y hace un año me propuso montar una editorial
propia. Yo hacía poco que había empezado a escribir y me pareció
una buena idea. De hecho, es algo así como la continuación de un
viejo sueño, ya que tuvimos una editorial de cómics en Argentina
allá por el 2007.
La
idea básicamente es tener una editorial en la que podamos mantener
el control creativo de nuestras obras, teniendo un especial cuidado
por la calidad literaria y visual.
En
poco menos de un año llevamos publicados una novela (3 días), una
antología de cuentos de terror (Carnaval de sangre) y ya estamos
preparando otra antología para fines de este año y varias cosas
más.
Y
en octubre presentaremos la editorial de manera oficial en Andorra de
cara a una futura distribución de los libros en España.
Pueden
ver nuestras publicaciones en la web: www.santaguadania.com
¿A
qué tipos de publicaciones os dedicáis en esta editorial?
Santa
Guadaña es una editorial de género: terror, misterio y ciencia
ficción. Busca combinar las raíces del género con una mirada
creativa más actual.
Combinando
elementos clásicos y aportando nuevos, tanto desde el contenido como
así también desde lo estético.
Nos
dedicamos de lleno a lo que amamos. Apostamos por devolverle al
género un poco de toda la satisfacción que nos dio.
¿Qué
semejanzas y diferencias ves entre el mundillo editorial español y
argentino?
En
el español todavía no estamos trabajando, sino que estamos
preparando nuestro desembarco, así que no puedo decirte demasiado
aún. Pero más allá de las editoriales, en España hay muchos
escritores talentosos que hacen lo imposible para tirar adelante sus
proyectos y eso es muy loable.
Lo
que sí creemos es que traemos cosas nuevas que todos los fanáticos
de género van a saber valorar. Estamos seguros de eso porque además
de producir horror y misterio y ciencia ficción, nosotros mismos
somos fans. Y aunque no estamos todavía en contacto estrecho y
dentro del mundo editorial español, sabemos por dónde van los
tiros.
En
cuanto a la Argentina, el desarrollo editorial es genial y con mucha
camaradería. Contrario a lo que pasa en otros lugares, todas las
editoriales de género somos independientes y colaboramos unos con
otros. Se nota que todos los que hacemos esto lo hacemos con amor,
por eso no vemos competencia sino que vemos a las demás editoriales
como productores de cosas que nos gustan y todos nos ayudamos cada
vez que podemos.
Es
más, como ejemplo puedo citar que, en cada convención, cada uno
comparte espacio con otras editoriales o lleva los libros de uno y de
las otras, porque tenemos claro que si estamos juntos tenemos más
fuerza.
Santa
Guadaña, por suerte, ha tenido una gran acogida en Argentina.
Nuestra primera novela (“3 días”, de Gonzalo Ventura) se ha
agotado y estamos en imprenta a la espera de la segunda edición.
Además ya empezaron las negociaciones para llevarla a la pantalla
grande. Por otro lado, “Carnaval de Sangre” se está vendiendo
muy bien y las primeras repercusiones hacen prever que se va a
convertir en nuestro segundo éxito.
Ya
terminando, ¿esta entrevista te ha parecido divertida o aburrida?
Divertida,
siempre es bueno poder expresarse libremente.
Y
ya para terminar, ¿puedes mandar un saludo a nuestros lectores?
Un
saludo a todos los lectores, ha sido un placer poder participar y
tener un momento para acercarles mis propuestas y pensamientos sobre
algo que me apasiona tanto como es el arte y sin el que no podría
vivir. ¡Muchas gracias!